Un significativo incremento de 800 Mbps a 3 Gbps de ancho de banda de internet comercial internacional se implementó en la red universitaria a fines de febrero.

Esta nueva velocidad de navegación está disponible para toda la universidad, sin hacer diferencias entre campus o con la oficina de Santiago y se habla de internet comercial ya que a través de Reuna existe acceso a otras redes internacional, pero que son académicas, o a servicios de Google o Microsoft.

Para el profesor Jorge Pezoa, docente del departamento de Ingeniería Eléctrica de la Facultad de Ingeniería de nuestra casa de estudios y quien participó de la licitación, “el upgrade de casi 4 veces el ancho de banda para las conexiones a internet es muy bueno, porque además hay un margen de crecimiento a futuro que nos permitiría resolver los problemas de internet que a veces surgían por la gran cantidad de usuarios que hay en la universidad”.

El nuevo contrato, vigente por 24 meses, además del aumento de banda ancha, contempla que la tasa de agregación sea 1:1, es decir, que la velocidad contratada sea “efectiva”. “Si uno contrata 3 Gbps, son 3 Gbps puestos directo a internet, no son compartidos. No es como en el internet en la casa, que uno contrata 1 Gbps y si pruebo, nunca voy a tener esa velocidad realmente (…) porque ellos hacen una tasa de agregación que es compartida”, explica Eduardo Rivera, jefe de la unidad Redes y Soporte de la DTI.

Con un nuevo proceso de licitación ad portas, las proyecciones que se tenían a fines de 2019 indicaban que los 800 Mbps disponibles serían insuficientes para enfrentar las demandas de servicios tecnológicos cada vez más utilizados. La situación de pandemia y de trabajo a distancia permitió que ese incremento no se produjera, pero sentó las bases para determinar la necesidad de aumentar fuertemente la velocidad de navegación.

“Este proceso se enmarca en la preparación que estamos haciendo para la vuelta a la presencialidad de nuestros estudiantes y toda la comunidad. Ya hicimos anteriormente otras adecuaciones en equipamiento. Adecuamos también, a través de Reuna, otros enlaces que la universidad posee y que nos permiten, por ejemplo, que las herramientas Microsoft que se están utilizando fuertemente tengan un canal diferenciado. Lo que nos faltaba incluir era esta parte del internet más comercial, y que es lo que viene a cubrirse con esta licitación”, indica Eduardo Rivera.

Otros aspectos que contempló la licitación son los Acuerdos de Niveles de Servicio (SLA), que obligan a la empresa proveedora a asegurar latencia (tiempos de respuesta), porcentaje de pérdida de paquetes máximo y disponibilidad del servicio.

“Yo felicito a la institución por generar un proceso transparente y que involucre a administrativos y docentes para licitar un servicio. Eso es super importante. El proceso fue llevado a cabo de manera muy oportuna. Fue impecable y participativo, eso hay que destacarlo”, concluye el profesor Pezoa.