Los grandes desafíos del proyecto de transformación de Chuquicamata, desde una mina a tajo abierto a un sistema de operación subterránea, fueron los aspectos centrales de la conferencia que el gerente de la División Chuquicamata de Codelco y exalumno de la UdeC, Sergio Parada, ofreció esta mañana en la clase inaugural de las carreras de ingeniería Metalúrgica y de Minas de la Universidad.
Parada hizo un diagnóstico de las dificultades que enfrenta hoy la minería del cobre, en el que destacó los problemas relativos a los costos de energía e insumos, la menor disponibilidad de agua, la disminución de las leyes de los minerales, el aumento del valor de la mano de obra, la influencia de la inflación y la tasa de cambio en los precios, la baja de inversiones y las mayores garantías que se exigen a los proyectos desde el punto de vista normativo.
Todos estos factores, señaló, demuestran que difícilmente se volverá a los niveles de precios logrados en la década pasada, y que la meta para todas las explotaciones es avanzar hacia una mayor eficiencia.  Por otro lado, indicó que la mayor demanda esperada desde países de fuerte crecimiento, como China, y de naciones emergentes, como India, “todavía demorará en crecer”.
En este contexto se sitúa el cambio en el sistema de explotación de la mina a tajo abierto más grande del mundo (que este año celebra un siglo), a partir de un proyecto que contempla una inversión de 4 mil 200 millones de pesos hasta 2019 y que, como señaló Parada, permitirá extender la vida útil de Chuquicamata en al menos 40 años.  Según dijo, de continuar la explotación como hasta ahora, la mina "se cerraría en cuatro años".
Chuquicamata subterránea, que también será la más grande en su tipo, constituye un gran paso, porque permitirá acceder a una cantidad importante de recursos. “Estos recursos ya no se pueden explotar con camiones o con palas, ni transportar por 20 kilómetros, cada vez con mayor costo. Por tanto, hay que transformar la mina y esa transformación nos va a llevar a ser competitivos”, dijo.
Con este proyecto, se podrá explotar las reservas que están bajo el yacimiento, estimadas en mil 760 millones de toneladas de cobre, y que representan más del 60% de lo explotado por Chuquicamata en sus cien años.
De acuerdo a Parada, las transformación de Chuquicamata exigirá cambios internos en la empresa, pero también en sus demandas hacia las instituciones formadoras de profesionales del área. El respeto a la vida, el compromiso y la responsabilidad, el cuidado del medio ambiente, el respeto por las comunidades, sintonía con la innovación y la sustentabilidad, y una formación integral son algunos de los elementos que, explicó, se requerirán de los nuevos profesionales.
En la oportunidad, el director de Ingeniería Metalúrgica, Froilán Vergara, agradeció la exposición del ejecutivo, a quien se le entregó una reproducción del mural de la historia de la Minería Chilena -obra que representa al Departamento- como muestra de la relación que une a los profesionales de la UdeC con Codelco y como homenaje al centenario de Chuquicamata.