Más de 300 investigadores, estudiantes, docentes y científicos se reunieron desde el 14 al 17 de octubre en la Universidad de Concepción para presentar cerca de 183 trabajos, en el XIX Congreso Chileno de Ingeniería Química, dando a conocer sus investigaciones, proyectos y los últimos avances en la Ingeniería Química, así como sus conexiones con otras especialidades.
Al término de la Jornada se entregaron varios premios al trabajo de destacados Ingenieros Químicos de distintas Generaciones.
El primer reconocimiento, Premio Universidad de Concepción al Desarrollo Industrial de Chile para Egresados de los últimos 10 años, fue para el ex alumno de la UdeC, Enzo Pandolfi, por su trabajo en enología en el Valle del Itata. Éste galardón premia e incentiva a los egresados de la carrera de Ingeniería Civil Química de la UdeC, que se distingan por sus condiciones e intereses en la fabricación y desarrollo de procesos industriales de alto valor, elaborados con productos naturales nacionales, con un desarrollo sustentable, con base en innovaciones tecnológicas para, de esta manera, favorecer el crecimiento de la economía nacional, mediante el aumento y diversificación de sus exportaciones y la disminución de la dependencia energética del exterior.
El ingeniero químico se mostró muy feliz con el premio y señaló que su proyecto innovador viene del área agrícola porque su familia siempre ha estado ligada a este rubro: “mi abuelo materno era dueño de una lechería cerca de Concepción, siempre me ha gustado el campo; mi papá también es un aficionado y llegamos por casualidad a un campo, en el Valle del Itata, que ya tenía viñedos. Desde la década de 1920 esa zona fue gran productora de vinos y nos hemos encontrado con mucha gente que conoce el oficio, que ha trabajado en esto”.
En ese sentido, Pandolfi hizo hincapié en su formación como ingeniero Químico para llegar a este proyecto viñatero. “Lo que me gusta de mi profesión es cómo te enseñan a pensar; todo tiene un proceso y hay muchos y distintos caminos. En ese escenario, cómo sacar mayor valor agregado a lo que teníamos fue lo que hicimos: un vino, pero un vino con características únicas. Siguiendo el concepto de “terroir” que aglomera bastantes variables, como el clima, el suelo, las personas que trabajan, las plantas de viña y eso es irrepetible, único”, señaló, agregando que “el ingeniero químico aprovecha muy bien la tecnología; es todo muy artesanal, pero trabajamos con maquinarias nuevas; hay que razonar de nuevas maneras”.
En la ocasión también fueron premiados los expositores Diego Catalán, en la categoría Oral, con la presentación Modelación y optimización de un proceso cromatográfico para purificación de mirosinasa. En tanto, en la categoría Póster el premio fue para Gonzalo Recio con su trabajo Uso de nanopartículas de cobre.
Finalmente, el Colegio de Ingenieros de Chile entregó el Premio Ingeniero Distinguido 2014 que recayó, por unanimidad del jurado, en los ingenieros Pedro Pavlovic - miembro de la Comisión Nacional del Litio y destacado por su trabajo sobre ese material- y Jorge Catepillán, uno de los fundadores del desarrollo del papel y la celulosa en Chile, durante los años `60, en Corfo, con un trabajo ininterrumpido en la escena nacional.

Verónica Zamorano