Como todos los años en agosto, los cinco recintos que administra la Unidad Hogares de la Dirección de Servicios Estudiantiles, Dise, de la Universidad de Concepción, celebraron la denominada Semana Interhogares, consistente en competencias de alianzas ideadas para potenciar las habilidades blandas y sociabilización de los más de 350 jóvenes beneficiados con este sistema de acogida.
La idea, indicó la Directora de la Dise, Sara Mendoza, “es que las directivas de los hogares se coordinen para realizar una actividad que permita a los jóvenes interactuar, conocerse y apoyarse, en una etapa que para muchos es solitaria, puesto que debieron dejar a sus familias y amigos en sus ciudades natales para venir a estudiar a Concepción. Como Dise apoyamos esta instancia mediante la coordinación de los espacios físicos y el financiamiento del almuerzo de clausura”.
En ese sentido, agregó la Jefa de la Unidad Hogares de la Dise, Lorena Ayala, “los jóvenes organizaron una serie de competencias en las cuales se unieron los tres hogares de varones y los dos de damas, en tres alianzas, llamadas este año: Roja, para los hogares Freire y Los Aguilera; Amarilla, para Rengo y edificio Los Tilos, y Negra, para Barros Arana y Cabinas Los Tilos. Resultó ganadora la alianza Negra, que coronó como reyes a Roberto Ramírez, alumno de Ingeniería Civil Mecánica, y Pamela Pérez, estudiante de Pedagogía en Educación Física”.
Por su parte, el alumno de Ingeniería Civil Matemáticas y presidente del Hogar Barros Arana, Ricardo de La Paz, señaló que “este año, -a diferencia de años anteriores- pudimos extender nuestro evento durante dos semanas y en deporte, por ejemplo, hicimos competencias mixtas de fútbol, básquetbol, vóleibol y tenis. En las noches también realizamos juegos de mesa, desarrollamos un día del humor y otro artístico, entre otras actividades, lo que fue bastante enriquecedor para todos, ya que significó una oportunidad para conocernos y crecer”.
Los hogares UdeC, explicó Lorena Ayala, “nacieron en respuesta a la necesidad de apoyar a jóvenes provenientes de lugares rurales de diversas partes de Chile con problemas económicos comprobados, previa evaluación de Bienestar Estudiantil. A este sistema pueden acceder estudiantes becados y prestatarios, para los últimos tiene un costo de 45 mil pesos mensuales, los que si lo desean son cobrados luego de un año de egreso del hogar”.
Instancias como esta, expresó Ayala, “son un tremendo apoyo que contribuye en la formación integral de nuestros alumnos. Este año, culminamos esta celebración con un almuerzo en el Casino de los Patos”.

Monserrat Chávez