Con la presencia de diversas autoridades de la Universidad de Concepción, se realizó esta mañana en el Campus Chillán el lanzamiento de la Escuela de Verano 2015 que este año llevará por nombre Aguas desbordadas: responsabilidad y futuro. De tal modo, esta tradicional actividad estival acogerá una de las grandes preocupaciones actuales y a la cual han adherido investigadores UdeC.
El anuncio lo dio esta mañana la directora de Extensión de la Universidad de Concepción, Soledad González, quien –acompañada por la Vicerrectora Jacqueline Sepúlveda- intervino en la conferencia de prensa realizada por el Departamento de Recursos Hídricos de la Facultad de Ingeniería Agrícola que estuvo referida a Organizaciones de usuarios del agua subterránea: el caso de la Ligua y Petorca.
González explicó que “el título de la Escuela de Verano 2015, deja abierta la posibilidad de perspectivas y sentidos diversos, los que irán surgiendo en la medida en que las distintas áreas disciplinarias que configuran la Universidad de Concepción acojan esta invitación a pensar, sentir, dialogar e incidir en la discusión actual sobre el destino humano ligado a las posibilidades que surgen desde el agua”. Además, invitó especialmente a la Facultad de Ingeniería Agrícola a sumarse a esta iniciativa y exponer los temas y formas en que esta actividad podría proyectarse para este verano en Chillán.
Apoyo a las organizaciones de usuarios
Lo anterior no fue casualidad, ya que la exposición realizada por el ingeniero civil agrícola Ovidio Melo, del Departamento de Recursos Hídricos, explicó cómo es que dicha Facultad ha aportado al desarrollo de las Organizaciones de Usuarios de Agua durante la última década, inicialmente, a través de la realización de diagnósticos y actualmente como encargados de desarrollar el Programa Apoyo a la constitución de comunidades de aguas subterráneas de los acuíferos del río La Ligua y río Petorca, a cargo de la Dirección General de Aguas del Ministerio de Obras Públicas.
Este programa, que comenzó a ejecutarse en octubre de 2013 y que termina en noviembre de 2014, tiene por objetivo –explicó Melo- “propender hacia una eficiente y sustentable gestión y manejo de las aguas subterráneas en los acuíferos del río La Ligua y Petorca, a través de los titulares de los derechos de aprovechamiento, quienes, organizados en Comunidades de Aguas Subterráneas, tienen la facultad de gestionar el recurso y mantener un sistema de control de extracciones que permita tal objetivo”.
La finalidad del programa se debe a que, aunque la legislación exige la creación de estas organizaciones desde 1997, al implementar esta iniciativa los usuarios de agua comienzan a ver la real necesidad de una organización sólida a través de la cual gestionar sus recursos.
Sin embargo, Melo explicó algunas dificultades con las que se han encontrado: “Actualmente, se espera la creación de 12 Organizaciones de Usuarios de Agua (OUA) en el sector; sin embargo, la forma en que se espera dividir estos sectores genera controversia entre los habitantes, pues hay zonas en las que actualmente actúan como una sola comunidad en torno a un pozo y serán divididos en tres grupos”.
Además, explicó que las OUA aún no alcanzan el reconocimiento social necesario en sus sectores encontrándose constantemente con que otras agrupaciones, de distinta índole, toman decisiones que afectan la utilización de los recursos hídricos.
Sin embargo, Melo fue enfático en señalar que uno de los objetivos del trabajo que se está realizando es la difusión constante de las actividades que se llevan a cabo y que, si bien los procesos de legitimación social suelen tomar tiempo, con la creación de más OUA se espera que los procesos sean más rápidos y satisfactorios.
Finalmente, hubo consenso en que actividades de extensión como la Escuela de Verano, contribuyen a posicionar el tema de los recursos hídricos como un punto clave del desarrollo del país que, actualmente, utiliza el 85% de estos recursos en riego para la agricultura y que, en épocas de escasez, deben ser administrados con conciencia, responsabilidad y proyectados al futuro como evoca el título de la actividad a realizarse en 2015.

Moira Fernández