Recordar que las empresas están formadas por seres humanos más que por entes productivos o números, es para el psicólogo Vladimir Huber, un paso básico en el cambio dentro de las organizaciones hacia una cultura de la felicidad y el bienestar laboral.
Este fue el tema de la conferencia que el especialista ofreció, esta mañana, ante académicos y representantes de distintas organizaciones y empresas locales, invitado por el Grupo de Interés en Felicidad y Bienestar Laboral (FBL) del Departamento de Ingeniería Industrial (DII).
El profesional -creador del Sistema Huber de Sanación, que incorpora los aspectos físicos, emocionales, mental y espiritual de la persona y que se basa en la psiconeuroinmunología- también abordó en su exposición la importancia de las emociones y los pensamientos, no sólo en la gestión de las organizaciones, sino en todo ámbito de acción de las personas.
Huber -quien es magíster y doctor ( C ) en Psicología- indicó que estos temas han cobrado mayor importancia producto de los cambios que se han venido produciendo en el último tiempo a partir de una comprensión más amplia del ser humano y que ha comenzado a ser incorporada en las organizaciones.
Antes, dijo, las empresas estaban preocupadas por la actualización en materias eminentemente técnicas y no en relación a las habilidades blandas, cuya importancia es reconocida. Además, indicó, hasta hace un tiempo las comunicaciones eran “bastante verticales, con un enfoque autoritario, de otra época, si se quiere; pero esto no es posible en al Siglo XXI, con las nuevas generaciones de graduados, que piensan de otra manera”.
Esto, afirmó, no funciona y son muchos las experiencias que lo prueban. Como ejemplo mencionó el caso de la IBM que, por mantener una forma de hacer, en 1993 reportó pérdidas por más de 8 mil millones de dólares.
“Ahora les va bien, pero tuvieron que hacer un cambio radical, porque estaban compitiendo con otra cultura. IBM, que es de Nueva York, estaba frente a la cultura de California, con Silicon Valley y chicos de 20 a 25 años, como Steve Jobs, que estaban formando empresas nuevas como Apple. Ellos tenían una cultura muy de avanzada, entonces IBM no entendía lo que pasaba con los cambios culturales. Todo esto es parte de las habilidades blandas”, señaló.
Las empresas que no cambian no viven, dijo, y para el cambio es importante trabajar en la felicidad laboral que, explicó, se traduce en la construcción de un clima al interior de la organización.
“Hoy hay mucha gente que no quiere levantarse para ir a trabajar porque no les gusta su lugar de trabajo y van a trabajar sólo porque hay cuentas que pagar. Esa gente da lo mínimo para que no lo despidan, no se esfuerza, no aplica su creatividad, no está 100% presente. Con gente así una empresa no puede prosperar. La felicidad laboral ocurre cuando hay un clima afectuoso, cuando hay solidaridad, cuando hay trabajo en equipo, cuando todos colaboran para el bienestar común y cuando eso ocurre, esa empresa surge, evoluciona y prospera”, afirmó.
Esta es la primera de una serie de conferencias que el Grupo FBL llevará a cabo durante el semestre con el fin de difundir y concientizar a estudiantes y el público penquista, en general, sobre materias relativas vinculadas a la felicidad y el bienestar laboral, como comentó la responsable de FBL, la docente del DII,  Ángela Zenteno.