Con tan sólo 19 años, el estudiante Joaquín Moraga anhela comenzar a la brevedad sus estudios de magíster, luego de finalizar esta semana su carrera de Licenciatura en Matemática en la Universidad de Concepción.
Afirmando que “en la  Universidad comencé a vivir este arte de crear y de expresar ideas a través de las matemáticas”, el joven sampedrino recordó que desde su primera participación en las Olimpiadas de Matemáticas organizadas por la UdeC, cuando cursaba séptimo básico,  su gusto por la Matemática se activó fuertemente. “Con esta experiencia descubrí  que la matemática de verdad  no es sólo calcular cosas o sacar cuentas, sino que lo importante son las ideas ingeniosas que se utilizan para resolver los problemas”,  señaló.
Luego de participar durante toda su vida escolar en las olimpiadas e incluso obtener una medalla de oro a nivel nacional cuando cursaba tercero medio, comenzó a asistir de oyente a la UdeC, y tras obtener puntaje nacional en la PSU, ingresó a estudiar licenciatura en matemática en el 2012.
Con entusiasmo y perseverancia, comenzó a rendir voluntariamente exámenes de conocimientos, lo que permitió  graduarse en tan sólo dos años. “Esta es mi vocación, por eso me dediqué a estudiar mucho por mi cuenta y eso me permitió egresar  pronto. Me siento exitoso, porque soy feliz haciendo lo que me gusta”, argumentó.
Su gran interés por mejorar sus conocimientos matemáticos no sólo se evidenciaron con su rápido egreso, sino con su colaboración permanente como alumno ayudante y con  el desarrollo de una investigación con el docente del Departamento de Matemáticas, Antonio Laface, sobre los  sistemas lineales de hiper superficies algebraicas en espacios predictivos.
Sobre sus próximos proyectos, comentó que  postulará a una beca Conicyt para realizar un Magíster en la UdeC, y luego un doctorado en Inglaterra, para dedicarse a la investigación de la geometría algebraica, que combina el álgebra abstracta, especialmente el álgebra conmutativa, con la geometría analítica.
También agradeció el apoyo permanente de sus padres y los docentes del Departamento de Matemáticas, reconociendo que “todos los profesores que he tenido dentro de la Universidad me han dicho alguna frase que ha marcado mi vida, mi rumbo y eso es algo que se agradece  mucho”.
Por último, manifestó su anhelo  de cambiar la percepción de las matemáticas, sobre todo en los escolares, señalando que “es una ciencia apasionante,  que no sólo se cultiva con talento, sino que con esfuerzo  e ingenio”.
Potenciar a los jóvenes talentos
Para el decano de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, Rodolfo Araya, casos como el de Joaquín son “una señal clara que en nuestro país existe una gran cantidad de jóvenes talentosos para estudiar ciencias. Es sin duda un tremendo logro,  el primer paso, porque estudiar matemática no es sólo terminar una licenciatura, sino una vocación de vida”, manifestó.
De este modo, destacó  instancias como las Olimpiadas y Campeonatos de Matemáticas, que han permitido detectar a jóvenes talentosos con el fin de alentarlos a canalizar su gusto por esta ciencia. “Tenemos la responsabilidad de acercarnos a los escolares para  mostrarles  que existe un futuro profesional y que es un área atractiva de conocimiento y que con entusiasmo y talento se puede estudiar estas ciencias”, aseveró.
También destacó la posibilidad que brinda la Facultad, en orden a que escolares interesados en potenciar sus habilidades matemáticas puedan acudir de oyentes a la UdeC, además de la flexibilidad que tienen los estudiantes de pregrado de adelantar ramos según sus conocimientos.
Asimismo, enfatizó  la calidad de los docentes, varios de ellos, extranjeros, y la cercanía que se genera con los estudiantes de estas carreras. “Existe un vínculo importante  entre profesores y estudiantes, un acompañamiento permanente que muchas veces va más allá de la docencia tradicional”, destacó.