Reafirmando su compromiso con la calidad de la enseñanza, el Departamento de Obstetricia y Puericultura inauguró la remodelación de sus dependencias, junto a los nuevos espacios y equipos, destinados al área de simulación clínica para el entrenamiento de los alumnos, todo desarrollado en el marco proyecto Mecesup Innovación Curricular en la Formación de la Matrona/Matrón basado en Competencias y Resultados de Aprendizaje.
La ceremonia contó con la presencia del rector Sergio Lavanchy; el vicerrector Alberto Larrain; el director de Docencia, José Sánchez y autoridades de la Facultad de Medicina, encabezadas por su decano, Raúl González, así como docentes y estudiantes.
En la oportunidad, el Rector destacó que esta iniciativa -que ha significado intervenir 275 metros cuadrados en el tercer piso de la Facultad de Medicina- ha permitido concretar un importante objetivo para el Departamento y la Carrera de Obstetricia y Puericultura.  “Estas nuevas salas, las dependencias remodeladas, los modernos equipos, y especialmente los pabellones de simulación van a ser un aporte enorme a la formación profesional”,  señaló.
La directora de la unidad académica, Alejandra Ceballos, afirmó que esta nueva  infraestructura “nos va a permitir avanzar en nuestras propuestas de formación vanguardista, liderar en nuestra Facultad una formación clínica y, sobre todo, ofrecer una educación de calidad”.
Como parte del proyecto fue posible mejorar los espacios destinados a salas de reuniones, oficinas para profesores y para el área administrativa, además de habilitar el área de simulación, constituida por dos pabellones que cuentan con toda la implementación para que los estudiantes de Obstetricia y Puericultura reciban entrenamiento pre clínico en materias relacionadas con el parto; en la atención del recién nacido y en el apoyo a la madre en torno a la lactancia.
Alejandra Ceballos indicó que la Ley de Derechos y Deberes de los Pacientes tuvo como consecuencia “que las universidades que dictan esta carrera hayan tenido una merma con respecto a las oportunidades que se dan a los estudiantes (en los centros de salud); entonces algunas universidades han implementado las salas de simulación ante una necesidad educativa”.
Esta Ley, cuyos efectos ya se visualizaban cuando se planteó el proyecto, significaba que los académicos tendrían que entregar “una mejor formación previa a la experiencia clínica de los estudiantes”, señaló la directora de la iniciativa, la académica Ruth Pérez.
De ahí que el proyecto se propusiera reforzar la docencia, con la implementación de un nuevo plan de estudios para la matrona/matrón y la capacitación de los académicos en metodologías educativas.
La académica contó que, al igual como ocurrió en muchos otros ámbitos, el proyecto debió sobrepasar una serie de dificultades derivadas del terremoto –sobre todo en la construcción y adquisición de equipos- antes de llegar al cumplimiento de los objetivos de  implementar el plan de estudios, mejorar las condiciones del proceso de enseñanza aprendizaje y capacitar a los académicos en metodologías pedagógicas.
“Es así  que con estas nuevas dependencias, con el funcionamiento de modernos laboratorios de simulación clínica, con académicos capacitados y con un personal técnico altamente preparado finaliza el proyecto que deja establecidas las bases para una nueva etapa de la carrera”, dijo.
El proyecto fue aprobado en noviembre de 2009 y demandó una inversión cercana a los 180 millones de pesos.