Cristina Voglio y Patricia Sáez, además de ser penquistas dedicadas por muchos años de su vida al trabajo, guardan un sentimiento e interés común: la preocupación por cómo enfrentar ser adulto mayor. Por eso, este año decidieron buscar una estrategia y hacer de este camino, un momento de oportunidad y también de dignidad.

Junto a otros adultos mayores, se inscribieron este año en el curso Estimulación de la Memoria y Desarrollo Cognitivo que imparte semestralmente la Escuela de Humanidades y Arte (Edhuarte), adscrita a la Facultad de Humanidades y Arte como uno de los cursos y talleres abiertos a toda la comunidad penquista para mejorar y hacer una vida de calidad desde el aprendizaje del idioma extranjero, las artes, la actualidad, nuevas tecnologías, la historia y en este caso: la estimulación de la memoria en el adulto mayor.

Voglio, secretaria bilingüe y cuya carrera laboral transcurrió en Asmar en Talcahuano, valoró positivamente el taller, señalando que “mi pensamiento siempre ha sido ser positiva y que día a día podemos estar aprendiendo cosas y vivir la vida lo mejor posible, y acá si hay algo que he podido recoger es practicar la tolerancia. Eso para mí ha sido muy importante”.

En tanto, Patricia Sáez, quien es exalumna de la UdeC y estudió educación básica, educación parvularia y otros postítulos en lenguaje y comunicación, contó que “a mí me matricularon, me matriculó mi hijo que estudia acá, porque él sabe que yo tenía esta inquietud y problemas con la memoria. Olvido palabras. Pasan 15 minutos y recién recuerdo lo que pensé en ese momento y otras veces puede pasar más tiempo. Y eso me tenía muy incómoda, porque además tengo antecedentes familiares de alzheimer”.

Viviana Castro es la psicóloga y profesora que dirige este curso-taller, es especialista en estimulación de la memoria y capacidades cognitivas, y en este, su segundo curso impartido, manifestó sentir "que las personas llegan con algunas expectativas y terminan con otras muy diferentes porque visualizan el tema de la estimulación de la memoria como algo muy complejo. Llegan con temor y miedo al deterioro. Los ejercicios que se hacen en este curso son bastante lúdicos, por lo tanto, van perdiendo ese temor y se van dando cuenta que sus capacidades se pueden entrenar”.

La docente hizo una invitación a toda la comunidad penquista a reflexionar y pensar que después de los 30 años de edad, no sólo el cuerpo se deteriora y hay que entrenar. “No sólo hay que entrenar el cuerpo, sino también la memoria. Es necesario llegar a esta etapa con una buena salud cognitiva, y todos podemos participar de los talleres de la memoria cognitiva”, señaló.

Más información con la coordinadora de Edhuarte, profesora Milena Leiva milenaleiva@udec.cl; o con la secretaria Carmen Moraga, camoraga@udec.cl; al teléfono 412204335.

Cristian Sandoval