La profesional se adjudicó este premio, que reconoce el aporte y la trayectoria de arquitectos y arquitectas no nacidas en Chile. García Lima es brasileña, pero vive desde hace 20 años en Concepción, donde ha desarrollado su carrera, al alero de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Geografía.

Claudia García Lima vive hace 20 años en Concepción, donde llegó tras su matrimonio con un chileno. El cambio fue radical: Desde Sao Paulo, una metrópolis cosmopolita, a Hualqui, en el medio del campo sureño. A pesar del gran cambio, parecía que su trayectoria estaba predestinada. Recuerda que en el año 1992 viajó a Concepción a conocer a la familia de su marido. En ese contexto, visitó la Universidad “y cuando estaba en la altura del Foro pensaba, debe ser maravilloso estudiar acá. Como estudiante de arquitectura es imposible quedar indiferente al diseño del campus”.

En 2001, ingresó a la carrera de arquitectura como profesora part time, y en 2005 obtuvo una jornada completa. “En ese momento pensé, no puedo creer que voy a ser parte de esta institución”, cuenta. Respecto a su trayectoria en la Universidad, reflexiona: “Aquí hay una plataforma para que uno pueda desarrollarse y parte del premio tiene que ver con esa oportunidad de mostrar lo que uno es capaz. Las oportunidades son clave, hay mucha gente capaz de hacer cosas, pero si no se presenta la oportunidad, quedan ocultas”.

Para García Lima, este reconocimiento no solo habla de su trayectoria, sino de la generosidad de sus colegas que la nominaron. “Mis colegas del Colegio de Arquitectos fueron súper generosos, porque podrían haber sido más proteccionistas, pero me dieron la oportunidad de integrarme. Este premio es postulado por los colegas y agradezco el reconocimiento a mi labor”.

Durante el tiempo en que se ha desempeñado como docente de la Universidad de Concepción, también ha tenido una amplia participación como parte del Colegio de Arquitectos regional. Fue su presidenta en dos ocasiones y, desde allí, formó parte de la organización de la primera Bienal de Arquitectura del Sur, que expuso obras de arquitectos desde Talca hasta Magallanes, en el año 2007. También, ha sido miembro de comisiones públicas tales como el Comité Regional Pro Movilidad, impulsado por el Ministerio de Transportes, y la Oficina Ciudadana de la Bicicleta, de la Municipalidad de Concepción.

En retrospectiva, el cambio desde una gran ciudad al sur de Chile ha rendido frutos. Asegura que en un comienzo “no fue todo maravilloso, pero sí fue una etapa de mucho crecimiento, de valorar las cosas importantes en la vida”. De todas maneras, dice que Concepción la impresionó desde el primer momento. “Me formé en Brasil, en la Universidad Presbiteriana Mackenzie, casa del afamado arquitecto Paulo Mendes da Rocha. Brasil y en especial Sao Paulo tiene una tradición de arquitectura moderna muy fuerte y es cercana a lo que hicieron acá Emilio Duhart y (Roberto) Goycoolea, por lo que siempre sentí una conexión muy particular”.

El premio Joaquín Toesca se entregará en una ceremonia organizada por el Colegio de Arquitectos, en Santiago, este viernes 3 de agosto. De la región, también será premiado el arquitecto Osvaldo Cáceres González, quien fue uno de los que diseñó la Casa del Arte, junto con Alejandro Rodríguez Urzúa y Javier Gutiérrez. Cáceres recibirá el “Premio Manuel Moreno Guerrero”, al arquitecto destacado en su labor profesional en el ámbito de la valoración del patrimonio arquitectónico nacional.

Los Premios del Colegio de Arquitectos son uno de los principales reconocimientos a los profesionales del área y destacan a once colegiados por su excelencia, trabajo y aporte a la disciplina.