En el marco de las actividades Semana del Libro del Departamento de Español, se llevó a cabo la presentación del texto dramático Carmen del Pino. La segunda mujer fusilada en Chile, del exalumno de la UdeC, Alejandro Ruiz.

La obra, de tres actos, rescata la historia de una mujer de Florida, condenada a pena de muerte por fusilamiento en 1854, acusada de haber asesinado a su esposo, Lucas Mendoza, hijo de un influyente comerciante de la localidad.

El autor contó que trabajó cerca de tres años en esta obra, un proyecto que nació a partir de sus clases de Literatura e Identidad en el Liceo Inés Enríquez Frödden de Florida, donde ha sido profesor por más de nueve años. “La leyenda llegó a mí por parte de mis estudiantes, que me narraron la historia de la Piedra de la Fusilada, y eso lo trabajamos en la asignatura de Literatura e identidad, redactando trabajos en relación al tema”, dijo.

Buscando más antecedentes sobre la historia, recibió del profesor Salvador Jaramillo las actas del juicio que condenó con la pena de muerte a Carmen del Pino y su cómplice José Anacleto Matamala, lo que le permitió conocer los hechos reales del caso, más allá del mito local. Por ejemplo, que la mujer fue fusilada en el Cerro Amarillo en Concepción y no en el lugar de la piedra.

Alejandro Ruiz contó que lo más le llamó la atención de este episodio fue, por un lado, que la mujer había sido violada por Mendoza y obligada a casarse con él para resguardar la honra de la familia, y, por otro, la brutalidad del asesinato. “Quedé fascinado con la historia de esta mujer y como una forma de aportar un poco a la cultura e idiosincracia (de Florida) quise escribir sobre la leyenda”, dijo.

Comentando el texto, la académica, especialista en teatro y dramaturgia, Dra. Patricia Henríquez, afirmó que esta obra “se inscribe en el desarrollo del teatro emergente de Concepción, un teatro que tiene larga data, que se remonta a las historias del TUC (en los años '60)”.

Por otro lado, destacó que el texto “explora en las problemáticas y en las historias que corren de boca en boca” y que tiene la virtud de rescatar un tema localizado en una zona campesina de la región dentro de una dramaturgia contemporánea que, dijo, si sitúa por lo general en el ambiente citadino de la costa o la zona minera. Este trabajo, agregó, también es parte de una producción dramática nacional y latinoamericana, llamada teatro-documento, que -como explicó- se basa se basa en textos que o ficcionales.

“Hacer dramaturgia con las historias locales creo que es uno de los valores de esta propuesta, iluminar esas historias locales en zonas más alejadas de los centros es otro aporte interesante en la dramaturgia de Alejandro Ruiz y eso contribuye al desarrollo del teatro local”, indicó la académica.