En conmemoración del Día internacional de la Reducción de riesgo de desastres, en la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Geografía, se llevó a cabo un taller organizado por la Red de Ayuda Humanitaria Chilena (Rahch), donde se mostraron distintas experiencias para contribuir a la reducción del riesgo de desastres.

Rosa Barrera, representante del Rahch en la Región del Bío Bío, fue la encargada de dar las palabras de bienvenida a la actividad, donde entregó un importante mensaje a los asistentes. "Estamos trabajando por tener una comunidad más segura y resiliente, queremos tener todo coordinado con el Sistema Nacional de Protección Civil para reducir los impactos que originan algunas catástrofes naturales o causadas por el hombre; nuestra misión es prevenir para que toda la población esté preparada", sostuvo.

En la oportunidad, Rodrigo Reveco, único chileno experto en riesgo internacional certificado por Naciones Unidas en incendios en espacios confinados, expuso sobre liderazgo de emergencia, el manejo de éstas y algunas vivencias de rescates, y catástrofes que ha tenido junto a su equipo.

Reveco es uno de los pocos peritos en el mundo capacitado para hacer frente a los más graves accidentes y fue el creador de la cápsula metálica que permitió rescatar a los 33 mineros atrapados en la mina San José.

El especialista indicó que son muy pocos los profesionales que se encuentran fuera de Chile dedicándose al rescate y las emergencias, por esto, enfatizó que la idea central de su presentación es mostrar cómo se trabaja, exponiendo también las experiencias en otros países.

"Estuve por ejemplo en el incendio de una planta nuclear en Japón y el varamiento de una plataforma petrolera en Alaska, situaciones donde se requiere de la intervención de especialistas que ayuden a controlar lo que parece inmanejable. En Chile necesitamos más gente que se comprometa con esta área, espero que con mis vivencias puedan entender la importancia del rescate y la prevención", afirmó.

Respecto a lo preparada que está la región para hacer frente a una emergencia, el experto destacó que “aquí están trabajando en serio, la zona está más preparada por el maremoto que golpeó las costas del Bío Bío, pero en cualquier momento puede venir otra catástrofe y debemos estar todos listos, ya que en una emergencia todas las manos faltan".

Por otro lado, Rosa Puentes, representante de la Junta de Vecinos de Ránquil, contó la experiencia vivida durante el incendio ocurrido en 2012, que se inició en Quillón. “No es agradable contar lo que pasamos, pero ustedes deben saber cómo sobrevivimos", expuso.

La dirigenta contó cómo perdieron todo lo que tenían debido a la catástrofe, "nunca creímos que el fuego llegaría tan lejos, cuando pasó el alcalde con las autoridades para decirnos que evacuáramos, nosotros nos negamos, ese fue nuestro tremendo error, no imaginar que el fuego pasaría como un toro enfurecido destruyendo todo".

Por esto, recomendó a los asistentes tener linternas y herramientas a mano dentro de sus hogares para poder actuar rápidamente frente a cualquier emergencia. Además, advirtió que uno de los grandes riesgos en las carreteras son las personas que tiran colillas de cigarrillos prendidas desde el auto, sin pensar en las nefastas consecuencias que esta mala práctica puede traer.