El método Floortime y la Musicoterapia son dos formas terapéuticas utilizadas en el desarrollo de niños autistas y ambas técnicas fueron abordadas en el seminario Intervenciones terapéuticas en los trastornos generalizados del desarrollo en el espectro autista: aplicaciones del método floortime y la musicoterapia, que organizó la carrera de Educación Diferencial de la Universidad de Concepción, junto a la Corporación Biautismo y Aspaut (Asociación de Padres y Amigos de los Autistas).
Gabriela Villafañe, jefa de carrera, señaló que estas técnicas tratan, fundamentalmente, de "un reconocimiento con el otro, donde lo importante es respetar en este caso a la persona con autismo en su proceso de vinculación con los demás y en el apego". Junto con explicar la importancia de ambas técnicas, la académica resaltó el trabajo que las profesionales de la educación diferencial llevan adelante, pues "asumimos cada vez más el rol que tenemos en el proceso formativo de estos sujetos, de manera que pueda alcanzar una mejor calidad de vida".
Villafañe explicó que junto a organizaciones como Aspaut y la corporación Biautismo se realiza una trabajo continuo de manera cooperativa y creativa. Según la académica, para alcanzar este propósito es fundamental continuar "dando pasos reales, pertinentes y eficaces en brindar una educación de calidad" a las personas con autismo y trastornos generalizados del desarrollo. Indicó también que acciones colaborativas son fundamentales para este desarrollo: "valoramos enormemente este trabajo, que se ha desarrollado en forma conjunta y que puede ser uno de los pasos importantes en tantos otros aspectos en los que podemos avanzar".
Indicó que los avances en el desarrollo de las personas con autismo han sido importantes en los últimos años, sobre todo en materia de inclusión, y mencionó que, entre otras cosas, "ello implica reestructurar la cultura, las políticas y las prácticas de los centros educativos para que puedan atender a la diversidad del alumnado de su localidad".
El método Foortime, también conocido como terapia de suelo, fue presentado a los asistentes del seminario (en su mayoría estudiantes de la carrera de Educación Diferencial y de profesores de distintos recintos educacionales de la zona) por la especialista Antonella Urzúa, quien realizó una introducción a esta técnica en la que se desarrollan capacidades relacionadas con la percepción, el lenguaje, la exploración motora y el proceso sensorial.
"Las interacciones deben implicar siempre un dar y recibir", explicó, agregando que el objetivo de este trabajo es "abrir y cerrar la mayor cantidad posible de círculos de comunicación". Una vez que el niño haya dominado esta interacción de doble vía, él puede utilizarla para superarse hacia otros niveles adicionales del desarrollo, incluyendo el juego imaginativo o simulado, el diálogo verbal y el pensamiento lógico.
Según cifras del Centro de Estudio de la Infancia, el autismo se presenta en uno de cada 500 nacimientos, a una tasa de 5 varones por cada niña. Es el tercer problema más común de desarrollo, después del retraso mental y la parálisis cerebral, pues crece a una tasa sorprendente de 10 a 17 por ciento anual. Sin embargo, se desconoce si esta estadística representa un aumento real del número de niños autistas o si se ve afectada por una mayor vigilancia y una definición más amplia del trastorno. De ahí la relevancia de actividades como la organizada por la UdeC, las que evidencia el interés por el estudio y abordaje de este tipo de condición.