El docente de la facultad de Arquitectura, Urbanismo y Geografía, Frane Zilic, fue nominado por la Universidad como su representante en el Consejo Directivo del Programa Estratégico Nacional de Especialización Inteligente para la Competitividad de la Industria Secundaria de la Madera, de Corfo.
Este programa involucra a las regionales del Maule, del Bío Bío, la Araucanía y Los Ríos, las zonas donde se concentra la mayor parte de la actividad maderera, y tiene por propósito dar mayor competitividad al sector.
Lo que se busca es fomentar la industria con un enfoque hacia “la remanufactura y transformación de la madera en productos y, principalmente, en su aplicación en la construcción”, señaló Frane Zilic, contraparte del mundo académico en este Consejo que integran representantes de los sectores productivo, privado y de Corfo.
El arquitecto, director el Programa Polo de Transformación Secundaria de la Madera de la UdeC, recordó que la idea de dar mayor valor agregado a este material ha sido un anhelo de larga data “que suena muy lógico dada la fuerte actividad forestal regional”, pero que no había encontrado un medio favorable para concretarse.
Hoy, a su juicio, existen las condiciones para impulsar esta idea. “La madera está tomando una posición privilegiada en el contexto internacional, ya que es el único material de construcción renovable y carbono negativo; los mayores estándares de eficiencia energética en la construcción se consiguen hoy en madera, lo que también permite alinear la economía familiar con los compromisos nacionales de reducción de CO2; las tecnologías de fabricación por mecanizado CNC en madera están maduras y ofrecen niveles de precisión y velocidad superiores a otros materiales”, señaló.
Por otro lado, agregó, la deprimida economía local “necesita con urgencia una actividad que genere identidad, empleo, negocio y distribución del ingreso, y que además sea compatible con nuestra débil matriz energética. La transformación secundaria de madera cumple con creces con estos requisitos y se alinea también a la visión que el gobierno tiene para lograr un crecimiento sostenible del país”, indicó.
Para el académico –que fue elegido por el  Consejo como su representante ante el Comité Ejecutivo del Programa- el retraso en la construcción en madera se debe a que existe un círculo vicioso, donde hay demanda y, por ello, no hay buenos productos ni buenas tecnologías, ni especialización profesional. “Con esto, lo poco que se hace es, en general, de mala calidad y termina impactando negativamente la demanda”, indicó.
El desafío ahora –dijo- es desarticular esta retroalimentación negativa a través de la generación de normas para ampliar las posibilidades del material, la formación de formación de capital humano a nivel técnico, profesional y de investigación. También, dijo, hay que mostrar buenos ejemplos de construcción y destruir mitos en torno a la madera.
“El objetivo de fondo es ambicioso. Se busca modificar la economía y detrás de eso está un cambio social y cultural, por esto los Programas Estratégicos son iniciativas a largo plazo, de diez a quince años, pero para que se prolonguen más allá del actual gobierno es necesario que logremos trabajar unidos, como región, en pro de esta visión”, indicó.
Para el académico, la UdeC, como parte del Consejo Directivo, tiene la posibilidad de colaborar en la definición de la estrategia para el sector. “Como representante de la UdeC invito a todos los que sean apasionados por la madera a ser partícipes de esta propuesta común”, concluyó.