Los últimos avances en los conocimientos generados en la Universidad en torno a las plantaciones dendroenergéticas (aquéllas de uso específico como fuente energética), biocombustibles y biomateriales fueron presentados hoy, en un seminario organizado por el Departamento de Silvicultura de la Facultad de Ciencias Forestales.
Este es el tercer año consecutivo que se lleva a cabo este tipo de seminarios, que buscan difundir el trabajo que realizan los investigadores en distintas temas, según explicó la Directora del Departamento de Silvicultura, Matilde Uribe.
“El objetivo del seminario de hoy es dar a conocer a la comunidad universitaria, empresas y público en general, los avances desarrollados en la Universidad en el ámbito de la producción sustentable de biomasa para fines energéticos. Queremos que se conozca lo que está haciendo Facultad de Ciencias Forestales en ésta y otras temáticas que se engloban en la Bioeconomía forestal”, dijo la académica.
La Doctora Urrutia llamó la atención sobre el crecimiento que han experimentado los estudios en el área en el último tiempo y que dan cuenta de un grupo de trabajo fuerte dedicado a un área que muestra un potencial de desarrollo para el país y también para la región. “De hecho, muchos de los estudios se han realizado en distintas localidades de nuestra región”, comentó.
Algunos de los tópicos tratados en este seminario fueron: la participación de la biomasa en la matriz energética regional, las características de las plantaciones dendroenergéticas, con ejemplos de especies específicas (como Paulonia y Miscanthus) y aspectos de genómica forestal para la producción de biocombustibles.
Uso de residuos
Otro de los temas tratados y que demuestran los distintos ámbitos en que se desenvuelven los estudios sobre recursos forestales como fuente de energía, es el caso de los desechos de las plantaciones.
De acuerdo al investigador Rafael Rubilar, el uso de residuos de cosecha de plantaciones forestales –principalmente de pino radiata- se ha transformado en una “actividad que se desarrolla fuertemente a nivel regional como proceso común extractivo, para la producción de energía en plantas térmicas, que hoy representa cerca de 340 MW a nivel regional”.
Como se trata de una actividad en crecimiento, el académico advirtió que es necesario avanzar en el establecimiento de parámetros de evaluación de su sostenibilidad. “Como se trata de niveles de extracción importantes, que representan la remoción de materia orgánica, de nutrientes, puede haber efectos en el crecimiento, incluso en la segunda rotación o en los cambios de uso de suelos”.
Asimismo, agregó, hay que considerar que la remoción de desechos también puede generar cambios en los niveles de secuestro de carbono. “Al quedar en terreno (el carbono) se fija, pero si se quema en una planta, se está liberando al ambiente”, señaló.